Las relaciones tensas desaconsejan la custodia compartida

Según la doctora en psicología y especialista en temas de familia, Pilar Aragón, «las relaciones tensas desaconsejan la custodia compartida». Según Aragón, «en una situación de divorcio, la custodia compartida puede ser una buena solución si las relaciones entre los padres son buenas, pero si hay problemas entre ellos, es mejor que uno de los dos tenga la custodia exclusiva».
Las relaciones tensas son una de las principales razones por las que se desaconseja la custodia compartida. En caso de que existan problemas entre los dos progenitores, esto puede traer consecuencias negativas para los hijos, que pasarían a estar constantemente en medio de una pelea.
¿Cuando no procede la custodia compartida?
Cuando no procede la custodia compartida es cuando hay una situación de violencia de género en la que existe un riesgo real para la vida, la integridad física, la libertad, la seguridad o la salud de la madre, el hijo o ambos. En estos casos, la custodia compartida no está permitida, y la custodia será atribuida a la madre o al padre, según corresponda.
¿Que mira un juez para dar la custodia compartida?
Un juez para dar la custodia compartida debería mirar la situación de ambos padres y sus hijos, el historial de la familia y el estado emocional de los niños. Los jueces también pueden considerar el número de niños que hay en la familia, la edad de los niños, el estado de salud de los padres y el estatus financiero de la familia.
¿Quién se queda la casa en una custodia compartida?
Las casas en custodia compartida son aquellas en las cuales ambos padres tienen el derecho a vivir en ellas durante un período determinado de tiempo, generalmente establecido en un contrato. Este tipo de custodia es ideal cuando los padres viven cerca uno del otro y pueden cooperar para el cuidado de sus hijos. Sin embargo, si los padres no pueden ponerse de acuerdo, la casa puede convertirse en un campo de batalla.
¿Cómo se reparte el tiempo en una custodia compartida?
Las horas de una custodia compartida se reparten de manera equitativa entre los dos padres, salvo acuerdo en contrario. De esta forma, cada uno tiene derecho a pasar una determinada cantidad de tiempo con el hijo. Generalmente, se establece un turno de fin de semana en el que el niño pasa unas 24 horas con cada progenitor. Además, hay que tener en cuenta que los padres deben acudir a todas las citas que les correspondan con el niño, independientemente de quién esté cuidándolo en ese momento.
Las relaciones tensas entre los padres, especialmente si son casados, desaconsejan la custodia compartida, ya que esta no es la mejor solución para el bienestar del niño.
Las relaciones tensas desaconsejan la custodia compartida, ya que el objetivo de esta medida es que los niños estén lo más cerca posible de ambos progenitores, lo cual no será posible si existen problemas entre ellos.